Hasta no hace tanto tiempo, cada 6 de julio en Pamplona sólo una parte de sus habitantes se sentía completamente libre para mudar de piel y echarse a las calles y, organizada en torno a las peñas, disfrutar de los Sanfermines.
Otra parte de la ciudadanía, las pamplonesas, no tenía más opción que ser espectadora de lo que sucedía en su ciudad. Espectadora entre el 6 y el 14 de julio y, como el resto del año, también cuidadora de los que sí participaban en las fiestas.
Activadas por la poderosa energía emocional del rito tradicional las mujeres hemos sido apartadas de las estructuras de poder y de la organización de las fiestas. Algo a lo que no fueron ajenas, claro está, las Peñas de Pamplona.
No fue hasta mediados del siglo XX cuando, algunas de esas peñas comenzaron a admitir mujeres entre sus socias. Un proceso que no se cerró hasta el año 1990.
Cuando hoy miramos atrás nos resulta insólito que durante tanto tiempo, se nos vetara el acceso a la condición de socia de nuestras peñas, y con ello, la participación en una forma de vivir y disfrutar de los Sanfermines
No obstante, no debemos perder la perspectiva sobre la naturaleza de y consecuencias de la violencia contra las mujeres que ello supone. Violencia simbólica que nos convierte, a las mujeres, en focos de atención y nos cosifica.
“A partir de todas las cosas que vivimos entonces, cuando no nos dejaban ser socias de la Peña, fue la primera toma de conciencia que tuve y me pregunté: ¿por qué mi mundo es diferente?”, recuerda Mari Carmen Oscáriz, primera socia de la Peña Los de Bronce y premio FESTA-Los de Bronce 2016.
En la actualidad, el ejemplo de las primeras socias de las Peñas de Pamplona socias que son parte fundamental de nuestro día a día como sociedades, más allá, también, de los Sanfermines es una inspiración para quienes seguimos trabajando por la Igualdad en nuestras fiestas.
Desde entonces, todas las peñas de Pamplona cuentan con socias de pleno derecho. Eso sí, aún estamos muy lejos, en algunos casos, de conseguir la paridad. Un reciente estudio impulsado por la Federación de Peñas de Pamplona señala que el 20% de los socios de nuestras peñas somos mujeres.
Te lo contamos.
UN BREVE RECORRIDO POR FESTA-LOS DE BRONCE: DE 2016 A 2019
En la actualidad, las socias de las Peñas de Pamplona representan el 20% del total de sus miembros.
Con este premio, FESTA – Los de Bronce dio el primer paso en la creación de un espacio único en la agenda de los Sanfermines.
Un espacio, impulsado por socias y socios de la SDR Los de Bronce compartido con miembros del resto de las Peñas de Pamplona, con instituciones, organizaciones y entidades comprometidas con la Igualdad en nuestras fiestas y en el cumplimiento del 5º de los Objetivos de Desarrollo Sostenible que forman parte de la Agenda 2030 de la ONU.
Con FESTA – Los de Bronce nos sumamos al trabajo para la erradicación de las violencias que sufrimos las mujeres cuando disfrutamos de nuestro tiempo de ocio en el espacio público y de entre ellas, la más importante: las agresiones y abusos sexuales.
"El 55% de las personas creen que las mujeres son retratadas negativamente en los medios".
Fuente: J Walter Thompson, Unilever, Tivo Research, Edelman Intelligence
Con FESTA – Los de Bronce visibilizamos a mujeres que han introducido en los Sanfermines la perspectiva de género, rompiendo, además, techos de cristal haciendo así posible nuestra participación plena y efectiva y contribuido a la igualdad de oportunidades a todos los niveles decisorios en la vida política, económica y pública en relación con el ocio en las calles.
FESTA – Los de Bronce impulsa la transformación de la sociedad creando una cultura de rechazo a todas las violencias contra las mujeres en los espacios públicos festivos desde la discriminación de género institucionalizada pasando por la violencia simbólica así como las agresiones y abusos sexuales y otro tipo de violencias y poner fin a todas las discriminaciones contra niñas y mujeres.
Fomentamos el pensamiento crítico y la creación de nuevos públicos mediante la producción y distribución por todo tipo de canales de contenidos culturales e informativos relevantes y de calidad.
Con esa vocación transformadora que nos anima, ayudamos a dinamizar el necesario debate ciudadano y colaboramos con los medios de comunicación para impulsar la reflexión sobre el papel de las mujeres en los Sanfermines.
Un debate que contribuye a la prevención de todo tipo de violencias que sufrimos las mujeres.
El espacio de reflexión crítica creado en torno a FESTA – Los de Bronce es accesible a todo tipo de públicos y nos ha permitido tejer redes de colaboración con otras entidades, organizaciones e instituciones para sumar fuerzas en la tarea de transformación de los espacios públicos durante el tiempo libre y de ocio.
En FESTA – Los de Bronce trabajamos para la construcción de nuevas masculinidades que, a través del conocimiento y ejemplo de la historia de estas mujeres, planteen nuevas formas de relación y vivencia de los espacios festivos y de ocio.
Y todo, gracias al compromiso voluntario y sin ánimo de lucro de socias y socios de la SDR Los de Bronce para la recuperación y documentación de la memoria de la participación en los Sanfermines de las mujeres.
No hay a quien no puedas aprender a amar, dicen, después de haber escuchado su historia. No hay una buena causa a la que no te adhieras después de haber escuchado una (su) buena historia. Sabemos que el mandamiento más importante de un buen narrador que quiere ganarse a quien le escucha es: ‘haz que le importe’. Por eso hemos recuperado esta historia de mujeres en Sanfermines.
En algunas de nuestras Peñas ese momento recogido en nuestro primer documental fue un pequeño paso. En otras, sin embargo, la demanda de las mujeres que finalmente lograron convertirse en socias de pleno derecho acabaría provocando un profundo proceso de reflexión interna que ha trascendido más allá para acabar teniendo un extraordinario impacto en la forma en la que hoy disfrutamos, mujeres y hombres, en las calles durante los Sanfermines.
“Cuando una mujer avanza, ningún hombre retrocede”. Por eso, desde 2016, estamos recuperando historias que atraviesan las barreras del tiempo y nos permiten experimentar hasta qué punto nos reconocemos, para lo bueno y para lo malo, en quienes nos han precedido; hasta qué punto hemos cambiado y hasta qué punto, haciendo nuestros esos relatos, avanzar hacia una sociedad sin violencias contra las mujeres.
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